CUIDADO FACIAL

TIEMPO PARA MIMARSE

 

Ayer me regalé un par de horas, enteras, para mí sola. Tuve la suerte de que era domingo, con lo cual, tenía más posibilidades de cogerme ese tiempo.  Es cierto que no tiene por qué ser dos horas, puede ser algo menos, siempre dependiendo de lo que tu vida te lo permita, pero siempre piensa que ese tiempo se lo dedicas a tu cuerpo, pero también a tu mente. Detener tu rutina para estar contigo misma es la mejor forma de, de vez en cuando, si no se puede siempre, recargar pilas.

Lo que hice durante ese par de horas fue cuidar mi cabello y mi piel,  principalmente la del rostro, que muchas veces nos olvidamos de ella. Nos empeñamos en luchar contra el paso del tiempo inyectando votox, vitaminas, ácido hialurónico, haciendo radiofrecuencia, laser facial e incluso recurrimos a la cirugía estética en algunos casos. Todo eso está fenomenal pero, de qué te sirve tener una piel estiradísima y sin arrugas si está apagada y cetrina? Por eso, regálate tiempo, como hago yo de vez en cuando y mima esa piel para que además esté bonita, luminosa e hidratada.

Para no hacer un post excesivamente extenso, os voy a contar los pasos a seguir y los productos que utilicé en el cuidado facial. Siempre, en todo tratamiento facial los pasos fundamentales son 4:

1.       Limpieza del rostro. La piel del rostro tiene que estar totalmente limpia antes de poner ningún producto en ella. Ayer le fui infiel a mi adorado Jabón Negro de Natura Sibérica del que ya os hablé en un post y decidí probar el que dicen que es el mejor limpiador facial del mundo (eso dicen). Este limpiador se llama EVE LOM CLEANSER y llegó a mis manos en forma de muestrecitas de la mano de mi queridísima Laia Martí que lo vende en su tienda online. Es una especie de crema mantecosa con un aroma fuertecito que al principio no sabes si es agradable o demasiado fuerte. Creo que me decanto más por la segunda opción. Esta crema que además tiene granitos exfoliantes, se aplica por todo el rostro haciendo círculos, evitando la zona de los ojos. Después mojas con agua caliente un paño que acompaña a dicha crema y comienzas un pequeño ritual jugando con el agua caliente y fría para abrir y cerrar los poros que, creedme, no es ni difícil ni engorroso y viene muy bien explicado.

La sensación de limpieza en la piel cuando terminas el proceso debo decir que es increíble, además de que no reseca nada la piel. No os niego que me encantó este limpiador y que posiblemente forme parte de mi neceser en breve.

2.       Exfoliar la piel. Si vuestro jabón o limpiador facial no es exfoliante, el siguiente paso en la rutina debe ser este. Usad cualquier exfoliante facial que tengáis por casa. A mí me encanta el exfoliante facial de NATURA SIBERICA que además de BIO, es baratísimo. La última vez que lo compré en mi ecotienda favorita KARAK creo recordar que me costó 7 euros el bote de 200ML . Es como arenilla fina de la playa de tacto agradable y un aroma que me encanta. Sin presionar demasiado pasadlo por todo el rostro excepto zona de los ojos y luego aclarar con abundante agua.

3.       Mascarilla. Paso importantísimo. Utiliza una buena mascarilla, simplemente eso. Y no significa que tengáis que ir al Corte Inglés a gastaros un dineral. En mi caso, utilizo desde hace un tiempo la mascarilla natural AMAFLORA . La venden en paquetitos de dos sobres individuales y vale el pack 2.90 euros. Es una mascarilla natural a base de Argán y Flor de Loto que hidrata en profundidad y me deja una piel preciosa con 20 minutos de exposición.

Durante esos minutos, relajaos, tomad un té, café o un vino, lo que os pida el cuerpo porque es vuestro momento.

4.       El último paso es la hidratación. Ya os comenté en otro post que yo últimamente me decanto por los aceites vegetales para este paso, aunque podéis usar vuestra crema habitual. Veréis, una vez terminado todo el proceso, como vuestra piel luce diferente, ha adquirido vida, se ve sana y bonita y vosotras os sentiréis de maravilla.

      Qué os parece que le robemos un par de horas a un domingo al mes y nos las regalemos? Creéis que es demasiado? O tal vez demasiado poco? Sea lo que sea, hagámoslo, vamos a robarle tiempo al tiempo y a concedernos pequeños momentos en los que, lo único que importe seamos nosotras mismas.

Nos vemos muy pronto.

Feliz día!